Cinco menores en Chiriquí resultaron heridos por pirotecnia sólo durante fiestas de año nuevo
Sumado a tres pequeños que sufrieron quemaduras en la pasada Navidad, entre el 31 de diciembre y 3 de enero, otros cinco niños con edades entre los siete y doce años, fueron ingresados al hospital materno infantil José Domingo de Obaldía (HMIJDDO) en Chiriquí, tras presentar severas lesiones y hasta pérdida de un dedo, mientras manipulaban artefactos pirotécnicos.
La directora regional de salud, Gladys Novoa, dijo que pese a todas las advertencias, campañas de concienciación y llamados a las empresas que se dedican a la venta de estos artefactos, no fue posible mantener a raya la situación, pues los padres son los encargados de evitar el uso de este peligroso material, «fueron incidentes lamentables, no sólo en áreas rurales, también en el distrito cabecera de la provincia hubo casos»
Comentó que un niño de siete años residente en Chorcha, corregimiento de Chiriquí, perdió un dedo de su mano izquierda y se le observó quemaduras de segundo grado en su rostro, cuando jugaba con fuegos artificiales.
El segundo infante ingresado al Cuarto de Urgencias, presentaba quemaduras de primer grado en su cara, provenía de Chiriquí Grande, provincia de Bocas del Toro.
Mientras otros dos infantes de 10 y 12 años de edad residentes en Nuevo Amanecer de David Sur, sufrieron quemaduras en sus rostros y lesiones en sus manos; y el quinto atendido en la sala de quemados, sufrió quemaduras de segundo grado en su mano, cuando participaba de una fiesta celebrada en Guarumal, distrito de Alanje.
Las quemaduras requirieron una atención multidisciplinaria por parte de los galenos del mencionado nosocomio, pues estas se clasifican según la profundidad y gravedad que registren en la superficie de la piel; de primer grado (superficiales), de segundo grado (espesor parcial) y de tercer grado (espesor total); las lesiones más comunes se presentan en manos, en ojos y en el rostro.
*Durante el pasado mes, un total de 8 niños, de los cuales 7 son varones y una niña, resultaron lesionados y requirieron el apoyo de cirujanos plásticos, ortopedas y otros especialistas producto del uso inadecuado de pirotecnia.*
