La manera en que alimentamos a nuestros hijos ha cambiado mucho a lo largo de las generaciones. Nuestras abuelas criaron a nuestros padres con un conjunto de conocimientos, y nuestros padres a nosotros con otro. Hoy en día, las nuevas generaciones de padres se ven expuestas a un sinfín de información y nuevas teorías sobre la alimentación infantil, lo que puede generar dudas e incertidumbres.
Sin embargo, hay algunos puntos clave que siguen siendo válidos:
- La leche materna es el mejor alimento para el recién nacido. La Dra. Bella Guerra, neonatóloga, lo confirma: «la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses de vida es lo ideal, y puede mantenerse incluso más allá de los 2 años». En caso de que la madre no pueda amamantar por alguna razón, las fórmulas infantiles de inicio son la mejor alternativa.
- La alimentación complementaria se inicia a los 6 meses. El bebé debe estar sentado y no tener reflejo de extrusión (empujar la comida con la lengua hacia afuera) para comenzar con sólidos.
- Se comienza con papillas de verduras, introduciendo una nueva cada tres días. Luego se pasan a las frutas, y se anotan posibles alergias o reacciones. Los cítricos se introducen más adelante, siendo el limón el último.
- La textura de las papillas debe ir aumentando progresivamente, desde grumos hasta trozos pequeños y luego pedazos más grandes.
Nuevas tendencias en alimentación de bebés:
- BLW (Baby Led Weaning o destete guiado por el bebé): El bebé elige qué comer y cuánto de la comida que se le ofrece.
- La Dra. Guerra aclara que este método no es adecuado para todos los bebés, especialmente aquellos con trastornos de tono o sensoriales. Se recomienda la supervisión de un profesional de la salud.
Suplementación para bebés:
- El único suplemento recomendado es el hierro, a partir de los 6 meses.
- La Dra. Guerra también recomienda suplementar con zinc y vitamina A, especialmente en épocas de resfriados y diarreas.
¿Hasta cuándo ofrecer leche materna?
- La leche materna es un alimento incomparable en los primeros años de vida, además de un vínculo afectivo entre madre e hijo.
- Sin embargo, a partir de los 3 años deja de ser la principal fuente de nutrientes. La OMS y las sociedades pediátricas recomiendan la lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses, y luego la introducción de alimentos complementarios adecuados y seguros.
En resumen, la alimentación de nuestros bebés debe basarse en las recomendaciones de los expertos, pero también debe adaptarse a las necesidades individuales de cada niño. Es importante consultar con un pediatra para obtener la mejor guía para su hijo.
