La Asamblea Nacional aprobó en segundo debate un proyecto de ley que busca transformar la alimentación de los panameños desde la escuela. La iniciativa, impulsada por la diputada Lilia Batista, modifica la Ley 75 de 2017 y establece la educación nutricional como un eje transversal en todos los centros educativos del país.
La mala nutrición, un problema global que afecta el rendimiento escolar y la salud de los panameños, fue el motor de esta iniciativa. Con esta ley, se busca fomentar hábitos alimenticios saludables desde temprana edad y garantizar el derecho a una alimentación adecuada.
¿Qué implica esta nueva ley?
- Educación nutricional obligatoria: Todos los estudiantes, desde el primer hasta el segundo nivel, recibirán clases sobre nutrición y alimentación saludable.
- Alimentos saludables en los colegios: El Ministerio de Educación se encargará de garantizar que los kioscos escolares ofrezcan alimentos nutritivos y adaptados a las costumbres de cada región.
- Gestión de residuos: Los centros educativos deberán implementar sistemas adecuados para la disposición de los residuos alimenticios.
- Vinculación con productores locales: Se promoverán intercambios entre los colegios y productores nacionales, especialmente en las comarcas indígenas, para fomentar el consumo de alimentos locales.
- Participación de padres de familia: Las asociaciones de padres de familia serán involucradas en la implementación de programas de salud y nutrición.
Con esta nueva ley, Panamá se suma a los esfuerzos internacionales por combatir la malnutrición y promover estilos de vida saludables. Se espera que, a largo plazo, esta iniciativa contribuya a reducir enfermedades crónicas y mejorar la calidad de vida de los panameños.
