La Ciudad de Panamá se convierte en el epicentro de la seguridad alimentaria en las Américas al albergar la «Reunión Regional de Fortalecimiento de Capacidades Técnicas en Inocuidad de Alimentos». Este evento, que se desarrolla del 6 al 8 de agosto, reúne a expertos de ocho países con el objetivo de establecer estándares comunes y garantizar la salud de los consumidores.
Orlando Athanasiades, director de Control de Alimentos y Vigilancia Veterinaria del Ministerio de Salud de Panamá, destacó la importancia de esta iniciativa para actualizar los conocimientos y fortalecer la vigilancia en materia de inocuidad alimentaria. «La unificación de criterios es fundamental para establecer normas que salvaguarden la salud de la población y promuevan el comercio justo», afirmó Athanasiades.
Los participantes abordarán temas clave como reglamentaciones, producción primaria y procesos de los alimentos, con el enfoque de «Una sola Salud». Esta perspectiva integral considera la salud humana, animal y ambiental como un todo interconectado.
«La inocuidad alimentaria no es solo un tema de salud pública, sino también un factor clave para el desarrollo económico», señaló Erick Santamaría, director de la Cadena Alimentaria del Ministerio de Desarrollo Agropecuario. Santamaría hizo un llamado a la población a adoptar prácticas saludables, como el lavado adecuado de los alimentos, para complementar las acciones gubernamentales.
La reunión regional se enmarca en un programa del Departamento de Agricultura de Estados Unidos que busca promover el comercio agrícola en América Latina y el Caribe. Miguel Arvelo, representante del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), explicó que la actualización periódica de las normas de inocuidad es fundamental para acceder a mercados importantes como el estadounidense.
Países participantes: Panamá, El Salvador, Guatemala, Honduras, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador y Perú se han unido a esta iniciativa regional para fortalecer la seguridad alimentaria y proteger la salud de sus ciudadanos.
Esta reunión representa un paso significativo hacia la armonización de las normas de inocuidad alimentaria en la región, lo que a su vez contribuirá a fortalecer el comercio y garantizar la salud de los consumidores.
