Cierran Darién para canalizar la migración
El Gobierno de Panamá anunció el cierre de tres pasos fronterizos utilizados por migrantes irregulares para cruzar el Darién, una peligrosa selva que marca la frontera con Colombia. La medida, según las autoridades, busca «canalizar» el flujo migratorio y reforzar la seguridad en la zona.
Los pasos cerrados se ubican en la costa pacífica y caribeña del Darién, donde se han incrementado las patrullas y se han instalado barreras perimetrales. El objetivo, según el Servicio Nacional de Fronteras (SENAFRONT), es concentrar los esfuerzos de las fuerzas de seguridad en zonas específicas para optimizar la lucha contra las organizaciones criminales que se benefician del tráfico de personas y otros delitos conexos.
Las autoridades panameñas también anunciaron la próxima implementación de la campaña «Darién», una iniciativa del nuevo Gobierno del Presidente José Raúl Mulino, cuyo objetivo es garantizar la paz y la seguridad en la región. El plan aún no ha sido detallado, pero se espera que incluya medidas para fortalecer la presencia policial y militar en la zona, así como programas de asistencia humanitaria para los migrantes.
El anuncio del cierre de los pasos fronterizos y la nueva campaña para el Darién se produce en la misma semana en la que el Presidente Mulino asumió el cargo, reiterando su firme postura contra la migración irregular. «Panamá no será más un país de tránsito», declaró Mulino en su discurso inaugural. «No permitiré que nuestro país sea un camino abierto para miles de personas que ingresan ilegalmente, aupadas por organizaciones criminales».
La migración irregular a través del Darién se ha convertido en una crisis humanitaria de gran magnitud. Miles de personas, principalmente provenientes de Haití, Venezuela y Cuba, emprenden este peligroso viaje en busca de mejores oportunidades en Norteamérica. La travesía por la selva está plagada de riesgos, incluyendo asaltos, secuestros, violencia sexual y enfermedades.
Las medidas anunciadas por el Gobierno de Panamá son un paso en la dirección correcta para abordar este complejo desafío. Sin embargo, se requieren soluciones integrales y regionales para atender las causas profundas de la migración irregular y garantizar la seguridad y el bienestar de las personas migrantes.
