Información que nos llega y proyecciones de expertos plantean una grave situación de salud en Panamá con el #CODVID19. La situación se torna sumamente peligrosa y puede causar un colapso total del sistema de salud.

Para frenar la curva ascendente de casos positivos, hospitalizados y muertos se requieren medidas radicales. El pueblo debe extremar las medidas de higiene y seguridad y quedarse en casa. Para la tranquilidad de la población el Gobierno debe asegurarle lo básico.

Proponemos estas 20 medidas:

Son 115 ultramillonarios y acumulan más de 20 mil millones de dólares. Eso no se lo gastarán en lo que les resta de vida. Y eso ni hablar de los atracos al Estado: Odebrecht, Blue Apple, Panama Papers, coimas, evasiones, robo de tierras, negociados, robo en la CSS, medicamentos y otros. Que donen mínimo una quinta parte (20%) serían 4 mil millones para enfrentar esta crisis. Les quedan más de 16 mil millones que les ayudará para recuperarse con creces. Les conviene porque el coronavirus no ve clase social, pero sí afecta a los más pobres. La crisis no la puede cargar el pueblo honesto, humilde y trabajador.
Trabajadores deben irse con salarios completos para cumplir la cuarentena total.
Bono solidario para sector informal (trabajador por cuenta propia) y desempleados debe ser de 500 balboas por mes para satisfacer lo mínimo por cada familia.
Altos funcionarios deben donar la mitad de sus salarios.
No pueden haber despidos ni nuevos contratos bajo la figura de acuerdos mutuos obligados o leoninos para el trabajador (que además son ilegales) que menoscaben las condiciones de trabajo o los salarios de los trabajadores y deben preservarse las fuentes de empleo.
No cobro de hipotecas, préstamos personales, créditos, tarjetas de crédito ni sus intereses.
Servicios gratuitos de luz, agua, comunicaciones, internet, cable, gas.
Suministro de agua a las comunidades que no cuentan con ella y recolección de la basura para impedir fuentes de contagio.
Atención especial a jubilados y pensionados, tercera edad, discapacitados, mujeres embarazadas.
Distribución gratuita de medicamentos para tercera edad, población vulnerable y afectados.
Atención a los sectores más vulnerables, madres solteras, comunidades indígenas respetando sus tradiciones.
No cobro de alquileres y suspensión de lanzamientos y cualquier acción judicial por parte de acreedores.
Rebaja y congelamiento de precios en productos y artículos de primera necesidad.
Sanciones ejemplares para especuladores.
Apoyo total a los trabajadores de la salud que arriesgan sus vida.
Información veraz y precisa al pueblo por parte de las autoridades.
Transporte gratuito.
No cobro de corredores.
El Estado debe comprar toda la producción agropecuaria nacional a precios reales para su distribución gratuita en la población
Acondicionamiento de hospitales a nivel nacional ante el peor escenario.